En esta ciudad, mis consultantes son particularmente damas hermosas, educadas e inteligentes, que están solas, sin amor y, algunas veces, su trabajo no es bien reconocido ni debidamente recompensado. Se trata de mujeres que han gastado miles de dólares en cirugías y tratamientos creyendo que la belleza atraerá la felicidad, el amor y el éxito; naturalmente, que ayuda mucho a conseguir todo eso, pero no por mucho tiempo y se encuentran de nuevo en el mismo sitio que cuando no eran agraciadas, hasta que una amiga o consejera les dice: “porque no vamos a que te lean las cartas; quizás te han hecho brujería y por eso no te va bien; visita a la señora que hace el baño de florecimiento para que te proteja de las envidias”.
Han tratado todo lo que el mercado ofrece y, aun así, el “hechizo sigue en pie”. No estoy inventando esto, me limito a relatar lo que la gente me cuenta y, después de haber recorrido tanto, llegan a mi consulta. Una explicación detallada al levantar su carta astral les permite finalmente entender el porqué de su “mala suerte”.
He dicho muchas veces que el lugar donde uno nace no es el mejor lugar para vivir y desarrollarse. Si el amor, el éxito y la gloria están en California, entonces, ¿qué hace usted en Miami?
Conocí a una dama con varios títulos profesionales, muy bien parecida, que se había casado ya dos veces y, según me dijo: “Nací sin suerte para el amor, veo mujeres sin presencia ni educación que encuentran a alguien que las mantenga y las quiera; en cambio, yo solo encuentro hombres que buscan aprovecharse de mí; esa fue la constante de los dos matrimonios que tuve y al final tuve que dejarlos, porque se sacaron la careta poco tiempo después de la boda. Gracias a Dios que no tuve hijos, porque tendría problemas mayores”.
¿Qué pasaba con esta señora? ¿Cuál era su problema? Vi en la casa del matrimonio en su carta astral que, si se quedaba aquí en Miami, ella podría casarse dos veces más sin éxito. Tenía un Urano mal ubicado (este planeta es cambiante y repentino) pero, si ella se mudaba al oeste de Estados Unidos, podríamos desplazar ese planeta a su casa nueve, con lo que podría tener diferencias de opinión con otras personas, pero le iría bien en cuanto al matrimonio y el dinero.
Recuerdan que la consultante mencionó que no tenía familia. Ello se debía a Lilith (el Malcuth de los Kabbalistas), que estaba en su casa cinco, (la casa de los hijos); o sea que, aparte de negarle el amor, le impedía tener descendencia.
Meses después de mudarse a San Francisco conoció a un empresario exitoso como ella, pero antes de tomar una decisión matrimonial me envió los datos del novio, porque quería saber si eran compatibles. Entendí su preocupación, porque se encontraba en un sitio nuevo y no conocía las raíces de esa persona, por lo que era mejor asegurarse.
La combinación entre ambos era perfecta, por lo que le respondí que él era la persona indicada. Hoy están casados, tiene dos hijos eurítmicos, (programación del nacimiento buscando el mejor día, hora y año), ya que no iba a echar por la borda su profesión, matrimonio y el éxito, trayendo hijos al mundo sin una programación astrológica
Hay un dicho que dice: La suerte de la fea la bonita la desea. Pero yo tengo un dicho mejor: “Si programas tus movimientos, obtendrás el éxito que te mereces”.
No esperes años para conseguir lo que es tuyo por derecho. Enfréntate al mundo conociendo qué pasos debes tomar, camina seguro(a), sabiendo que esa es la ruta para encontrar la olla de las monedas de oro y no tendrás que esperar a tener 50 años para lograrlo. Hay gente que muere soñando y planeando, y jamás se atreve a dar el primer paso para cambiar su destino.
Un dato suelto, pero importante: Entre el 26 de julio y 6 de septiembre de 2015, Venus estará bastante cerca de la órbita de la Tierra, luego la oportunidad es propicia para encontrar el amor esquivo (damas y varones que pasan años sin encontrar el amor pueden encontrarlo en agosto) y es propicia para la reconciliación (esposos separados o novios separados pueden volver a enamorarse)
