Aquí la historia, ¡Increíble pero cierto¡
Desde hace varios años trato de viajar durante mi cumpleaños y anti cumpleaños para mejorar mi economía, profesión, salud y la de mi familia. Espero este evento con ansiedad y hago mis planes con antelación. Naturalmente, viajo en la fecha y lugar indicado, siguiendo el consejo de mi siempre fiel cosmobiólogo, Rubén Jungbluth.
Este año mi revolución solar o cumpleaños estaba planeada para Laredo, Texas. Reservé mis vuelos y el hotel, y me puse en camino hacia mi destino. Revisé muchas veces mis apuntes y correos electrónicos para asegurarme de que iba a estar en el lugar adecuado a la hora indicada. Hice un viaje maravilloso, con pocos inconvenientes, y hasta llegué temprano a mi destino final.
Sentada en el pasillo de aquel aeropuerto, mientras esperaba para abordar mi vuelo de regreso, me di cuenta que, en mi afán por viajar correctamente, había invertido la hora (13:18) y fecha (21 de febrero) de mi estadía. El corazón me dio un brinco en el pecho. Mi cumpleaños caía el 21 de febrero a las 13:18 (no siempre la revoluciones solares ocurren en el mismo día de nacimiento). ¡Pero aquí estaba yo, lista para partir el 18 de febrero a las 13:21! Antes de que pudiera lamentar mi error, sentí una voz a mi derecha que me llamaba.
A mi lado estaba sentado un joven de unos 20 años a mas, pidiéndome que le preste mi teléfono móvil para hacer una llamada. Mi primera reacción fue de desconfianza. ¿Quién era esta persona? ¿Me robaría? ¿Tendría cómplices que se llevarían las pocas pertenencias que tenía conmigo?
Sobreponiéndome a mi miedo inicial, le pedí el número y lo marqué. Una voz contestó diciéndome que el joven era un refugiado cubano, acababa de cruzar la frontera y su abuela, la persona que llamé, necesitaba saber dónde estaba para enviarle fondos para volar a Tampa, Florida, su destino final. El joven me enseñó que solo tenía 5 dólares y sus familiares querían enviarle el dinero vía Western Union. Le expliqué a la persona que estaba al otro lado de la línea que la agencia más cercana estaba a tres millas y el avión partía a las 6:40 p.m. Ya eran las 5:00 p.m. Era imposible que él pudiera salir del aeropuerto, ir a Western Union a recoger el dinero, regresar a tiempo y pagar. El próximo vuelo salía al día siguiente a las 7 a.m.
“Corriendo riesgos” pague el ticket de este jovencito con mi tarjeta de crédito. Este proceso tomó unos 15 minutos, durante los cuales me enteré que él había cruzado la frontera hace una semana. Con mucho esfuerzo y después de darle a la policía mexicana todo el dinero que traía, como $2,000, se presentó en la frontera de los Estados Unidos, donde lo aceptaron como refugiado político. Una vez que sus documentos legales fueron puestos en orden, le permitieron viajar a encontrarse con sus familiares.
Me dijo que era casado y su esposa planeaba hacer la misma ruta, pero él había venido primero para allanar el camino. También me platicó que había nacido el 24 de julio de 1988.
Según la cosmobiología, el ingreso de Júpiter al signo del León (en julio 2014), indica que los nativos de este signo están ingresando a un nuevo ciclo de bonanza.
Conversando mientras esperábamos la llamada de la aerolínea, me confesó que su esposa había perdido al mediodía, recientemente, un embarazo de tres meses. Considerando que la franja horaria que lleva a una persona a emigrar de su país cae entre las 12:01 p.m hasta las 2:00 p.m., la pérdida pudo haber ocurrido durante este tiempo.
Mercurio me había jugado una mala pasada. Yo no estaba en el lugar equivocado a la hora incorrecta, muy por el contrario, debía estar ahí para darle la mano a este joven compatriota. Luego de unos minutos lo dejé en la puerta de embarque hacia su destino final.
Abordé mi avión, pensando que, aunque mi viaje no había tenido el éxito que esperaba, había cumplido otra meta con este joven, que probablemente tenga unos aspectos astrológicos mejores que los míos. Con su nacimiento en Leo y la reciente pérdida del embrión a la hora que me señaló, devino en un cambio beneficiosa para él.
Bueno, ahora la pregunta es, ¿qué me tocará vivir estos meses por no haber estado en Laredo?. Espero poder reacomodar los astros para mi anti-anticumpleaños.
Dra. Gemma Carrillo. / Febrero 20, 2014
