Tres años atrás, recibí la alarmante llamada de un joven al que llamaré «Martín», hijo de una pareja de amigos a los que asesoro como coach cosmobiológico hace ya más de 15 años. Martín, al terminar la universidad, había lanzado como emprendimiento una librería, la misma que había empezado a decaer en sus ventas a partir de un suceso que, debo confesar, me llamó bastante la atención.
«Mi novia ingresó un gato negro a la librería. Es bastante común tener gatos en librerías, pero siento que esta mascota me trajo el negocio abajo. Solo unas semanas de su llegada, los clientes desaparecieron y redujimos las ventas a un 50%. He hablado con mi novia para deshacernos del animal, pero ella no quiere y atribuye el bajón de las ventas a otra cosa» – me confesó Martín
¿Y cuál es el misterio con los gatos negros?
En la superstición popular, el gato negro es considerado como un animal de mala suerte. Mientras que en civilizaciones antiguas como la del Antiguo Egipto se los consideraba animales sagrados porque estaban relacionados con la diosa Bastet. En la cultura hebrea y babilónica a los gatos se les relacionaba con serpientes, seres que simbolizaban el peligro.
Los gatos negros han sido relacionados con la brujería y la hechicería. En la edad media, en muchas regiones de Europa se acostumbraba a la caza de brujas, que por lo general eran personas con pensamientos revolucionarios para la época y que iban en contra de la Santa Inquisición. Es así como se empezó a señalar al gato negro como a la reencarnación del diablo en la Tierra y que era el acompañante de las brujas.
¿Es realmente un causante de desgracias?
Retomando la historia de Martín, decidimos realizar el análisis del momento actual de su carta astral, la carta de su novia y del ingreso de la gatita a la librería para encontrar el por qué la librería no caminaba como era debido. No consideré analizar la carta de la apertura del negocio porque sabía que no iba a transmitirnos ningún problema, ya que esta había sido inaugurada astrológicamente. Después de analizar las cartas, encontré que la gatita había ingresado en el momento en que la Luna, que representa a los consumidores, estaba en oposición a Mercurio, que simboliza la librería. Le dije a Martín que la solución estaba en que adoptara una mascota, pero esta vez en un día y en una hora que no solo la Luna y Mercurio estuvieran en un buen contacto cósmico, sino también que Júpiter y el Sol estén en un buen ángulo para que rápidamente la librería se recupere y crezca de manera exponencial.
Martín se alegró de que había una salida, pero inmediatamente le dije “lo que te voy a expresar de repente no te va a gustar, el asunto es que en la carta astral de tu novia Saturno, desde la casa 8, forma una oposición con Mercurio, esta relación cósmica aparte de indicarnos que ella es una persona de ideas fijas, por no decir testaruda, a ti no te favorece en los negocios, especialmente en los de librería. El asunto es serio y habrá oportunidad para que lo conversemos. Por ahora, debes tener confianza en que la fecha que va a ingresar tu nueva mascota va a mejorar grandemente tu librería”.
Hace pocos días, recibí una llamada de Martín, esta vez su tono de voz era otro. Tras haber ingresado una segunda mascota, otro gatito, a la librería en la fecha y hora que le brindé ha logrado reposicionar su negocio. Es más, ni la pandemia lo trajo abajo, pues el servicio de venta de libros por delivery impulsó mucho más sus ventas.
Por lo tanto, queridos lectores, el color del animalito no tuvo ninguna relación con la caída del negocio de Martín, lamentablemente la fecha y hora del ingreso del gato a su local fue un detonante de la baja en las ventas. Si estás motivado a cambiar también algún aspecto de tu vida, no solo el económico, sino también en el amor o la salud, permite que los astros te indiquen qué hacer para alcanzar el éxito. ¿Quieres dar el primer paso? Te obsequio tu horóscopo, aquí.
