Hace varios días, vi un reportaje en el canal de televisión alemán Deutsche Welle acerca de cómo los argentinos no quieren a la estrella mundial del fútbol Lionel Messi. Argumentan que es porque salió muy chico de Argentina, no creció en Argentina, se hizo en España: Para los argentinos, Maradona (n. 30 de octubre de 1960, Buenos Aires) es y seguirá siendo su héroe, nadie más. Algunos, por no decir muchos, dicen: “Primero Dios, segundo Maradona, y después nosotros y los otros”. ¿Fanatismo o gran sentimiento de identificación? En dicho reportaje de la DW también se argumentaba que Messi no ha ganado un mundial para Argentina, por lo tanto, no se me merece el cariño de esta nación… A pesar de todos los logros futbolísticos de esta estrella del balompié, los argentinos no lo consideran argentino.
Aquí en Perú tenemos a Claudio Pizarro, quien se destacó bastante en nuestro país, y cuando fue a Europa, a Alemania, su actuación fue más que excelente, pero cuando regresa a Perú su juego no tiene el mismo brillo, esto es, no marca goles como en Alemania.
¿Por qué ocurre esto? Ensayaré una explicación apoyándome en la cosmobiología, en particular, en la reubicación geográfica del individuo, que mueve la dirección con la que vienen los influjos planetarios hacia el individuo, haciendo que lo maravilloso que vive en un lugar no lo sea en otro.
No tengo las horas de nacimiento de Leo Messi y Claudio Pizarro, pero basándome en la reubicación geográfica, me atrevo a decir que estos dos jugadores de fútbol se vieron muy favorecidos por el éxito cuando dejaron sus países de origen; al cambiar de coordenadas geográficas modificaron la dirección de los influjos cósmicos que recibían en sus países de origen; en pocas palabras, con la mudanza de país “saltaron” hacia una vida de triunfos, que prácticamente habría sido imposible para ellos si hubieran permanecido en sus países de origen.
Admito que no sé nada de fútbol, pero los análisis que he realizado de las trayectorias profesionales de jugadores (de Brasil, Colombia, Argentina, etc.) comprados por clubes importantes de Europa y otros continentes, me permiten decir que las distintas horas de nacimiento de estos jugadores (lo que permite conocer la ubicación del Sol, símbolo del éxito) conectadas con Júpiter (símbolo del triunfo) señalan que algunos jugadores son sobresalientes dondequiera que vayan, en tanto que otros no lo son. Si lo que estoy expresando fuese comprendido por los jugadores y sus familiares, seguramente harían los esfuerzos para aplicar en ellos el Factor 3M del Éxito; y me permito decirle a la “hinchada” (los fans) que, si no apoya mentalmente, esto es, sino entrega energía mental permanentemente a su futbolista, este cae en su rendimiento.
La energía mental de la gente es lo que alimenta el alma del líder y hace que mantenga su autoridad en buena posición, que su liderazgo se desarrolle en el campo del deporte o la política (la renuncia de PPK a la presidencia del Perú tiene su origen en el hecho de que los peruanos le retiraron la confianza, dejaron de entregarle energía mental. Todo lo contrario ocurrió con Paolo Guerrero, el respaldo de los más de 30 millones de peruanos ha hecho posible que Guerrero pueda jugar en Rusia 2018).
Si hablamos de artistas, debo mencionar al actor español Antonio Banderas (n. 10 de agosto de 1960), conocido en su país antes de trasladarse a vivir a Hollywood, pero realmente no fue sino hasta que él se reubicó geográficamente en la llamada Meca del Cine (Hollywood) que llegó a ser mundialmente conocido. La respuesta a este fenómeno se encuentra en el hecho de que Banderas nació a las 9:00 pm, en Málaga; al mudarse a Hollywood, parecía que había nacido a la 1 de la tarde. El cambio de hora de nacimiento lo lanzó al estrellato mundial.
Pero, no hay que ir hasta lo alto del firmamento para ver qué sucede con las mudanzas a otro país. A un caballero considerado por sus pares como el vendedor estrella de una empresa extranjera asentada en el Perú, quien se alejaba constantemente de su hogar por su trabajo, no le quedó más que aceptar que la esposa le planteara el divorcio para que ella pueda casarse nuevamente.
Superado el dolor, este caballero resolvió irse a vivir a Nueva York, Estados Unidos. Según él triunfaría en dicho lugar, pues se decía: “Soy un buen vendedor y seguramente que en NY también destacaré”. Aunque nunca pudo destacar ni hacer dinero allá él se quedó a vivir en NY. Claro, pienso que más fue por la vergüenza de no haber triunfado.
¿Cuál es la respuesta astrológica de la ausencia de triunfo de este caballero en NY? El nacimiento de su último hijo en horas de la noche y en Luna Llena. La Luna Llena le trajo la ruptura conyugal; y el nacimiento nocturno, la caída en su progreso. Esta situación no cambió, es decir, no mejoró, pues el futuro de este caballero ya no dependía de él sino de su hijo. Solo si el hijo se hubiera reubicado en Asia, este caballero hubiera encontrado el camino del éxito en NY. Y, ¿si hubiera adoptado una mascota? Esta historia tuvo lugar en los años 90 del siglo XX, tiempo en el que aún no había descubierto que tanto las mudanzas como las mascotas mejoran enormemente el destino de las personas.
Regresando a L. Messi (n. 24 de junio de 1987, Rosario), circulan varias versiones del momento de su nacimiento: seis de la mañana, cuatro de la tarde y ocho de la noche. Lo más probable es que él haya nacido a las seis de la mañana ya que, al reubicarse en España y Europa, parecería que Messi hubiera nacido entre las once de la mañana y el mediodía, lo que explicaría por qué su juego es tan sobresaliente en el Viejo Continente y menos sobresaliente en el Nuevo Continente.
Y, ¿cómo influye Ciro, el tercer y último hijo de Messi hasta el momento, nacido en Barcelona, España, cuando comenzaba el 10 de marzo de 2018, de noche, en el futuro de esta estrella del fútbol? Favorablemente, porque, en el momento del nacimiento de Ciro, Júpiter lanzaba un ángulo armónico de 120° o trígono al Sol, por lo tanto parecería que él hubiera nacido con los primeros rayos del Sol de la mañana, Y, si Messi fuera “adquirido” por un equipo deportivo de Japón, Australia o Nueva Zelandia brillaría no como un Sol sino como varios soles. Y ¿En Rusia 2018? Nos aventuramos a decir que él tendrá una actuación destacada.
Poco a poco, los astrólogos nos estamos dando cuenta del valor de las horas de nacimiento de los individuos y de sus hijos, así como del tremendo papel que juega la reubicación geográfica en el mejoramiento del Destino. ¿Queremos emigrar, vivir en otra ciudad, en otro país, cuál es el que más nos conviene? Esta debe ser la pregunta básica de toda familia que desea emigrar. Sí, ciertamente, la mayoría de veces no podemos elegir el país adonde deberíamos ir a vivir, y simplemente viajamos. Frente a esta situación, y “viviendo ya en nuestro nuevo país”, la mudanza de casa y la adopción de mascotas son las herramientas más convenientes que están a nuestro alcance para avanzar sin tropiezos que impidan la conquista del éxito.
