¿Qué hace que una persona destaque más que otra, que todo lo que toca se convierta en oro? La respuesta está en el momento cósmico que rodea nuestro nacimiento; es decir, debemos conocer la influencia de los planetas y estrellas que acompañan nuestro nacimiento.
Bungula, Regulus, Sirius, Altair, etc., estos nombres pocos comunes en nuestro vocabulario son estrellas de tremenda importancia para nuestro éxito y están irradiándonos permanentemente (como diciéndonos: “aquí estoy; considérame en la programación de tu nacimiento y te haré famoso, adinerado, te daré buena salud y gran poder”). Ciertamente, hay algunas estrellas que solo “titilan” adversidad y desgracias, incluyendo la ceguera no solo intelectual, sino física, tales como Rastabány las Pléyades.
Unos cuantos días atrás, señalamos que Regulus, la estrella que irradia grandes honores y riqueza rara vez duraderos, estuvo presente en el nacimiento de Michael Sayman, el genio de las APP. ¿Rara vez duraderos? Afortunadamente, el conocimiento de esta forma de actuar de Regulus nos lleva a utilizar la inteligencia -y Michael la tiene en abundancia-, pues también se ha visto favorecido por las buenas influencias del Sol y Júpiter, que le imprimen éxito, prestigio y fortuna.
Entre 2011 y 2080, la luz de Regulus ilumina con honores aquello que hagamos entre el 21 y 25 de agosto, especialmente, el 23 de ese mes.
Bungula, la estrella que irradia grandes victorias, parece tener gran predilección por los individuos de cuna humilde y marginados, pues “los coloca” en un plano desde donde imparten órdenes a las grandes mayorías. He aquí dos ejemplos: Barack Obama y Nicolás Maduro, los actuales presidentes de Estados Unidos de América y Venezuela, respectivamente.
Entre 1962 y 2041, la luz de Bungula colmará de victoria aquello que hagamos entre el 19 y 23 de noviembre, especialmente, el 21 de ese mes.
Arriesgándome a ser tildado de vanidoso, expongo que, en los más de 40 años que practico la astrología, estudiándola e investigando, para no limitarme a copiar a otros autores, “El Factor 3M del Éxito” (Maternidad, Mudanza y adopción de Mascotas, las tres energías que debemos acoger para procurarnos un destino superior) representa para mí “un descubrimiento iluminado por Sirius”.
Entre 1994 y 2067, la luz de Sirius reviste de devoción y éxito aquello que hagamos entre el 04 y 08 julio, especialmente el 06 de ese mes.
Hemos conversado acerca de las bondades de algunas estrellas y planetas, pero tengamos presente que la diferencia entre obtener algo de éxito y obtener el gran éxito con respecto a “eso” que queremos hacer o sacar a la luz en esos días consiste en conocer el mejor momento de las 24 horas del día para hacerlo.
Entonces, la pregunta que surge en este punto es si la estrella que nos acompaña desde nuestro nacimiento y/o el nacimiento de nuestras acciones podría dejar de influenciarnos de manera positiva o negativa en algún momento. Sí, y esto depende tanto de la naturaleza de la estrella como del tipo de influencia planetaria que se recibe en el momento, a lo que deberemos sumar la presencia de los eclipses de Sol.
Citamos como ejemplo al famoso actor John Travolta (n. 18 de febrero de 1954, 2:53 p.m., N. Jersey), cuyo nacimiento se vio influenciado por la estrella Alpheratz, que irradia intelecto agudo, honores, riquezas y acciones pioneras. Con su baile en la película “Fiebre de Sábado por la Noche”, Travolta desencadenó la era de la música disco.
A causa de las influencias negativas de Saturno y varios eclipses de Sol, la carrera de Travolta iba cuesta abajo, en caída libre entre 1983 y 1989, y esta tendencia solo se detuvo entre 1989 y1990, porque su estrella, Alpheratz, y el Sol de su natalicio lo relanzaron al estrellato con la película “Tiempos Violentos” (Pulp Fiction).